Es un sábado nublado, un buen día para hacer galletitas de chocolate. Tenemos una receta que es muy simple y en la que pueden ayudar los más pequeños. La masa d estas galletas es muy noble y no requiere de medidas exactas ni de ingredientes imprescindibles. Lo mejor que tienen es que se pueden hacer con lo que hay en la despensa. Los básicos: harina, azúcar y polvo de hornear. Todo lo demás puede variar. Primero colocamos en un bol grande aaproximadamente dos tazas de harina, una de azúcar y una cucharada generosa de polvo de hornear. Estás medidas pueden no ser exactas, con el tiempo aprendemos a cocinar a ojo y es una buena manera. Si falta un poco par las dos tazas de harina, no es problema, si quieren poner un poco más de harina también está bien.
Tenemos harina, azúcar y polvo de hornear, ahora vamos a buscar que tenemos en la despensa para ponerle a las galletas. Semillas: de sésamo, girasol, lino, alpiste, chiá, amapola entre otras. No es necesario usar todas, pueden elegir las que más les guste o las que tengan. Otras cosas que podemos usar: coco rallado, canela, pasas de uva, avena laminada, gengibre, miel, chocolate amargo, café, ralladura de naranjas, de limón, trocitos de chocolate, nueces picadas, maní, almendras, en fín, lo que tengan. Las pasas de uva conviene cortarlas bien pequeñas y pasarlas por harina antes de integrarlas a la mezcla para evitar que se quemen.
La idea es que sobre la base de los tres elementos agregar lo que tenemos en la despensa con un criterio de combinación basado en los sabores, ejemplo: chocolate, con cáscaras de naranja; coco y canela, miel y canela, limón y gengibre, multi semillas, avena y miel, sésamo y girasol, chispas de chocolate, trocitos de manzana y canela.
Una vez mezcaldos los ingredientes secos, hacemos un hueco y colocamos un huevo, media taza aproximadamente de aceite y comenzamos a unir la mezcla con leche, agua o jugo de fruta. Debemos lograr una mezcla húmeda y engrudosa, no muy seca como para amasarla ni muy blanda que chorree. La dejamos reposar un momento para que se hidraten bien los elementos secos. Mientras engrasamos una asadera y prendemos el horno. Se cocinan muy rápido en horno eléctrico y un poco más lento en horno a gas.
Vamos colocando en la asadera con una cuchara los montoncitos de mezcla de forma irregular. Hornear.
Cuando se sacan si se desea los pueden pintar con un caramelo espeso. También podemos colocar un trozo de manzana en cada galleta antes de poner al horno.
Como ven, da para que la imaginación se libere y la creatividad haga de las suyas. Como es una receta fácil podemos invitar a los más pequeños a mezclar y a colocar la mezcla en la asadera, también a pintar con caramelo las galletas terminadas con un pincel, esto les gusta mucho a los chicos. Son ideales para la tarde, llevar de pic-nic o guardar para la merienda de la semana. Se guardan en un frasco, lata o envase plástico y tenemos siempre un bocado rico para acompañar un estimulante tecito. Si vamos de visita a lo de la tía vieja, o a lo de una amiga, colocamos unas cuantas galletas en una bolsita de papel o naylon y atamos con una cinta de dorada o de color, le colgamos una cartita con un mensaje cariñoso y es un lindo regalo de amor. También puede constituir una interesante fuente de ingresos.
mmmmmhhhh.. deliciosas! Gracias Eli, por ayudarnos a disfrutar el arte de cocinar y deleitarnos creando juntos, en familia.
ResponderEliminarAndrea y Nico.